Publico mi primer libro “Los guerreros de la libertad” frustrado al asegurarme de que la Ilusión había sido asesinada por la realidad.
Explicó, el partido ARENA se funda para conservar nuestras tradiciones, cultura, valores y ofrecer a los salvadoreños una institución democrática que los represente, cuando la amenaza comunista se cernía sobre El Salvador.
Muerto su líder, el partido pasa a manos de los que laman dueños del partido y lo justifican pagando las planillas y colocando a empleados de sus empresas para dirigirlo.